MADRID - OCIO
DEL 3 AL 28 DE ABRIL EN LA SALA ROJA
Los Teatros del Canal presentan el estreno en español de Las chicas del calendario, la historia real de una asociación de mujeres de un pueblo de Yorkshire, que decidieron posar para un calendario benéfico y que se convirtieron en un fenómeno mundial. La adaptación de Marc Rosich se estrena bajo la dirección de Antonio Calvo en la Sala Roja el 3 de abril, donde permanecerá en cartel hasta el día 28.
En la producción española, a cargo de la productora Anexa en colaboración con los Teatros del Canal, el elenco se compone de algunos de los nombres más carismáticos de la cartelera teatral nacional: Beatriz Carvajal, María Garralón, Asunción Balaguer, Soledad Mallol, Berta Ojea, Cati Solivellas, Carmen Esteban, Cristina Fenollar, Manuel Fernández Nieves, Javier Lago, Samuel Señas, Charo Zapardiel y Sonia Villalba.
Estos son los actores que ponen cara (y cuerpo) a las protagonistas de esta historia que hará que el público pase de la lágrima a la risa. La comedia se vuelve así en una competición interpretativa entre siete actrices extraordinarias, que arropan al espectador hasta conseguir que deje el teatro viendo el mundo como un lugar mejor.
El dramaturgo británico Tim Firth ya había llevado al cine la hazaña de Las chicas del calendario en 2003, en una versión que protagonizaron Helen Mirren y Julie Walters. En 2008 tuvo lugar su estreno sobre un escenario en el Festival de Teatro de Chichester, de donde inmediatamente pasó a los teatros del West End londinense. Desde 2010 el montaje sigue girando por escenarios británicos.
Las chicas del calendario, como serían mundialmente conocidas, dedicaron el calendario a John Baker, el marido de una de ellas, muerto de leucemia en 1998. La mujer de John, Angela, y sus amigas eran miembros de una asociación de mujeres un poco alocada. En una de sus reuniones, una de las mejores amigas de Angela sugirió hacer un calendario alternativo, en el que posarían desnudas. La idea provocó muchas risas y mucha diversión durante el duro tratamiento de John.
Estas mujeres pretendían inicialmente generar fondos para comprar un sofá para el hospital donde John recibía el tratamiento y después de su muerte, decidieron seguir con la idea como homenaje a su amigo. Hasta el momento han recaudado más de 1,5 millones de libras para la investigación de la leucemia.
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