lunes, 14 de diciembre de 2009

Vuelve la polémica, vuelve la misa de la familia

.
El 27 de diciembre un año más se vuelve a celebrar la fiesta de la Sagrada Familia de Nazaret. Una misa multitudinaria que se celebrará en la Plaza de Lima y que recibirá gente de todos los puntos de España.

La misa de la familia todos los años genera polémica porque muchos opinan que enfrenta diferentes opiniones y puntos de vista sobre la libertad de las personas. Unos piensan que la libertad es dejar actuar a los demás como quieran con sus vidas y no entrometerse, y otros piensan que la libertad se consigue respetando el derecho a la vida.

Madrid 27 de diciembre. Plaza de Lima

Desde mi punto de vista me parece una celebración que está fuera de lugar. Cada uno debe dejar hacer a los demás con sus vidas lo que quieran (por supuesto dentro de la ley), porque cada uno es responsable de sus actos. En esta celebración se toca también un tema muy delicado que es el matrimonio entre los hombres y mujeres como lo normal y lo que este fuera de este ámbito como anormal. Desde mi punto de vista cristiano hay temas como este que no comparto.

Por si fuera poco y para rizar el rizo, en la Misa de la familia también hay guerra política y se enfrentan los votantes del PP y PSOE. El PSOE acusa al PP de que cuando este gobernaba la iglesia no convocaba este tipo de actos.

Si tanta polémica crea, tantas discusiones y tanto odio, no debería celebrarse públicamente.
.
.

3 comentarios:

EMNM dijo...

Pues entonces que se prohiba todo tipo de manifestación callejera.

Creo que ese no es el tema, la iglesia católica así como cualquier otra religión puede decir misa, nunca mejor dicho, para eso están, otra cosa es que nos guste o no lo que dicen.
Es lo que tiene vivir en una democracia libre, cada día menos libre pero libre

anapedraza dijo...

Están en su derecho, aunque traten temas que no gustan a una parte de la sociedad. No deja de ser una manifestación, que está amparada por la Constitución.

El problema que estamos viviendo, a mi juicio, es la crispación que cada día aumenta más y más, y nos están dividiendo, encima no nos deja ver el bosque.

Yo me considero cristiano, aunque no comulgo con la Iglesia católica, porque está anclada en el pensamiento de hace siglos en muchísimos casos, y ellos deben de ser los abanderados de la tolerancia; pero como los que gritan son los que más se hacen notar, ya tenemos el lío.

Referente al aborto. Después de muchísimos años sin tocar el tema, ahora la tenemos liada. Lo mejor, un referendum, y lo que salga salió.

¡Un abrazo!

MIGUEL

Madame Tafetán dijo...

Pues no se debería celebrar por dos cuestiones muy sencillas: en primer lugar la religión debe ser una práctica privada y en segundo lugar es una misa, no una manifestaciónne pro/contra de lo que sea.
Yo no soy católica (aunque sí he sido educada en un colegio de monjas) y lo que sí tengo claro es que lo fundamental en esta vida es el respeto a los demás, en su estilo de vida, en sus convicciones, en sus opciones... y creo que el catolicismo también se basaba en eso, pero ya no. Me explico: la gente de a pie sí, pero la jerarquía religiosa no y cosas como esta no hacen más que "violentarme" y hacerme pensar que son unos intolerantes cuando a mí me enseñaron que era lo contrario.
Luego que no se pregunten por qué cada vez menos gente dice ser católica: dan una imagen terrible