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Las obras del intercambiador se van a realizar en dos fases que tendrán una duración de dos años. La primera hasta marzo de 2011.
Lo bueno es que no tendrá que cerrar sus puertas y las 215000 personas que pasan a diario podrán continuar usándolo.
En esta primera fase se va a ampliar el vestíbulo de Metro que probablemente ya pasará al modelo de supervisor comercial. Se van a sustituir las escaleras mecánicas, que aunque funcionan, son muy lentas y estrechas.
La actuación más importante y la que más falta hace en el intercambiador de Avenida de América es sin duda el sistema de ventilación.
El intercambiador ya se remodeló en el año 2000, pero diez años después acusa muchas deficiencias entre las que se encuentra también el problema del ruido y la iluminación en la zona de autobuses. Estos problemas tendrán que esperar hasta la segunda fase cuando se instalarán las mamparas que acondicionen las salas de espera y aislen del ruido, calor y humos.
Después de haber adaptado casi todos los grandes intercambiadores de Madrid, por fin le toca el turno al de Avenida de América que falta le hacía. Sobre todo por las condiciones de climatización que tiene. Hasta ahora el intercambiador de Avenida de América ha sido un gran asador donde la gente que espera los autobuses o se adentra hasta el metro tiene que soportar ruido y sobre todo altas temperaturas.
Las obras del intercambiador se van a realizar en dos fases que tendrán una duración de dos años. La primera hasta marzo de 2011.
Lo bueno es que no tendrá que cerrar sus puertas y las 215000 personas que pasan a diario podrán continuar usándolo.
En esta primera fase se va a ampliar el vestíbulo de Metro que probablemente ya pasará al modelo de supervisor comercial. Se van a sustituir las escaleras mecánicas, que aunque funcionan, son muy lentas y estrechas.
La actuación más importante y la que más falta hace en el intercambiador de Avenida de América es sin duda el sistema de ventilación.
El intercambiador ya se remodeló en el año 2000, pero diez años después acusa muchas deficiencias entre las que se encuentra también el problema del ruido y la iluminación en la zona de autobuses. Estos problemas tendrán que esperar hasta la segunda fase cuando se instalarán las mamparas que acondicionen las salas de espera y aislen del ruido, calor y humos.
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1 comentario:
¿Cuántas veces se han reformado y vuelto a reformar y otra vez reformado para después terminar reformando los intercambiadores? ¿Es que no se diseñan bien desde el principio? Aquí se hacen las obras sin pensar en el futuro y luego se quedan desfasadas enseguida. En vez de tanta rebaja de sueldos de funcionarios y trabajadores públicos, que planifiquen bien las obras.
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