El metro de Madrid, al igual que los metros de muchas grandes ciudades, siempre ha sido escenario de robos y hurtos en los andenes y vagones. Hoy en día el número de denuncias ha crecido considerablemente.
Los carteristas son de todas las nacionalidades aunque las mayoría proceden de países del Norte y el Este de Europa.
Actúan en grupo y a veces hasta descaradamente y el “modus operentis” es el siguiente: Justo en el momento en que se van a cerrar las puertas entran dando un pequeño empujón aprovechando este momento para sustraer la cartera o algo del bolso, el grupo rodea a la victima y pasa entre ellos el objeto robado, de manera que si hubiera algún tipo de acusación, no se supiera a quién inculpar. Llevan algún abrigo o periódico para poder ocultar lo que roban justo en el momento de hacerlo. Operan sobre todo en las horas punta en las líneas de más afluencia de viajeros.
En algunas épocas del año desaparecen pero luego vuelven por lo que se trata de un fenómeno permanente en la red.
El prototipo de victima preferido son los extranjeros, si es posible de edad avanzada. Las mujeres también son un blanco fácil para ellos Aunque nadie está libre de poder caer sise lo pones fácil.
La estaciones con más índice de peligrosidad son Chamartín, Nuevos ministerios, Avenida de América, Atocha-Renfe o Méndez Álvaro. Las líneas favoritas de los carteristas son la 1 y la 10.
Los vigilantes de seguridad y la oficina de policia de sol, encargada de estos temas, los conoce y los tiene identificados.
3 comentarios:
¿cortarles las manos? cortarles las manos es poco. Yo les ponía a trabajar gratis en una mina de carbón.
Yo una vez vi como a una mujer le intentaban meter la mano dentro del bolso, da mucha rabia pero tampoco puedes hacer nada en ese momento.
Además del calor y los retrasos que sufrimos en el metro, igual llegas al trabajo sin el monedero.
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